EE.UU. despliega recursos navales en la frontera marítima con Cuba bajo nuevas órdenes ejecutivas de Trump

Miami, EE.UU. – La Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG) anunció el despliegue inmediato de activos navales y especializados en la frontera marítima con Cuba y otras áreas clave, como parte de las nuevas órdenes ejecutivas emitidas por el presidente Donald Trump. Estas acciones tienen como objetivo reforzar la seguridad marítima, combatir la migración irregular y el tráfico de drogas en aguas internacionales cercanas a las fronteras estadounidenses.

El almirante Kevin Lunday, comandante interino de la USCG, calificó a la Guardia Costera como “la agencia de seguridad marítima más importante del mundo” y subrayó su papel fundamental en la protección de las fronteras marítimas de Estados Unidos.

Lunday detalló que las operaciones se centrarán en áreas como la frontera sureste de Estados Unidos, especialmente cerca de Florida, para disuadir posibles migraciones masivas desde Haití y Cuba. Otros puntos de atención incluyen la frontera marítima en el Golfo de México, el Pacífico, y territorios de EE.UU., como Guam, Puerto Rico y las Islas Vírgenes.

En coordinación con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Departamento de Defensa, el objetivo principal es “detectar, disuadir e interrumpir actividades ilegales, como la migración irregular y el tráfico de drogas, antes de que lleguen a nuestras fronteras”, indicó el almirante.

En paralelo, el Departamento de Seguridad Nacional, liderado interinamente por Benjamine Huffman, lanzó una nueva fase de redadas dirigidas contra migrantes indocumentados, priorizando a aquellos con antecedentes criminales.

Además, la administración Trump canceló el programa de parole humanitario que había beneficiado a más de 1.5 millones de migrantes de Cuba, Venezuela, Haití y Nicaragua. En su lugar, se implementará un sistema de evaluación caso por caso, endureciendo aún más los requisitos para ingresar legalmente al país.

Estos movimientos representan un cambio significativo en las políticas migratorias y de seguridad fronteriza en comparación con la administración anterior, marcando una postura más rígida en la protección de las fronteras estadounidenses.